Pablo Lilienfeld & Federico Vladimir: Bajo el lecho marino, un dragón

Los dos artistas, afincados en Bélgica, nos muestran una coreografía acuática en una piscina a medio camino entre la danza, el deporte y la ciencia ficción.

Bajo el lecho marino, un dragón desafía los códigos de conformidad establecidos e invierte la visión espacial del público colocándolo literalmente debajo del agua. El fondo de la piscina, a través de los ventanales del hall, funciona como una pantalla en la que se inscribe la ficción: una criatura fantástica, transindividual, desmembrada y conectada a través del líquido, formada por la subjetividad desdoblada de las dos nadadoras. Bajo el lecho marino, un dragón es una fábula visual y sonora que reflexiona sobre de la relación entre la persona individual y la colectividad apoyándose en la coreografía, la banda sonora original y la iluminación.

Este trabajo es una de las Piezas Dragón, una serie de trabajos que especulan sobre diversas formas de colectividad, imaginando modos de estar juntas que no reducen lo colectivo a una mera suma de individuos separados. Para ello, las Piezas Dragón exploran dos elementos que atraviesan lo colectivo: la automatización y la ficción. Los motivos en la piel del dragón, esa serie sin fin de piezas que conforman su cuerpo son entendidos como eventos, movimientos o narraciones que componen, una tras otra, una geometría infinita del deseo.

Bajo el lecho marino, un dragón, producida por Azkuna Zentroa, es una versión site-specific de los materiales coreográficos y sonoros de Dragón, descansa en el lecho marino, producido y presentado en Veranos de la Villa de Madrid en 2018.

Pablo Lilienfeld y Federico Vladimir

Pablo (1981) y Fede (1983) son pareja desde 2014. Desde el inicio de su relación su práctica artística se ha entrelazado con su relación. La intimidad es el punto de partida de su trabajo, en el que persiguen representaciones de la colectividad que desafíen las formas dominantes en las que hablan de sí mismos. “Narrarse es cuidarse”, es su lema. Como ellos mismos dicen: “hablar de nosotros mismos también es cuidarnos (y cuidar a los demás)” .